martes, 28 de junio de 2011

La Zona Euro y otras vainas

Mi huerto no está en la Zona Euro.


Sí, sí, como lo leeis, mi huerto ya no forma parte de la zona euro.

Pero además, es que se ha decidido unilateralmente, sin período de preaviso, ni asambleas, ni nada de nada.

Es que ni un mísero bando, ni una nota anónima. Nada.

Un mañana de domingo, salgo al balcón huerteril, y me dispongo a hacer la ronda. Veo un tomate Marmande por arriba: bien, pasa la revista. Lo observo por abajo: ¡Ahí va, la peseta!

Pues sí, tengo la peseta en mi huerto. Adios al euro.

La peseta, bonito alias de la podedumbre apical.

En las fotografias de por ahí abajo, podeis ver la cara y la cruz de la moneda. Digo... de la peseta esa.


Tele plaga.

Mi hijo ya está demostrando dotes para los negocios: plagas a domicilio, veinticuatro horas al dia, siete dias a la semana.

Y gratis, oigan. Para la familia, me refiero.

Observen la fotografia de los caracoles, que además, hacen vida en el huerto. Y comen, los joios.

Mira que hay mascotas... pues no, él, caracoles.

Una noche se escaparon. No digo más, que me da el tembleque y el estress postraumático ese.


La flor del pepino.

Los pepinos ya hace unos dias que están en flor. Todas las flores son masculinas. Bueno, hay una femenina, pero no he podido fotografiarla, pues estaba a contraluz, y yo no soy precisamente el Picasso de la fotografia. Otro dia será.

Es curioso esto de las flores de los pepinos. Las femeninas son las que tienen el pepino. Y las masculinas, pues no. Mira tú. Ya, ya se que es una gilipollez lo que estoy diciendo...


Tomate gordo y colorao.

Pues sí, ya hay un tomate (Monfavet, para más señas) que se está empezando a colorear. Y de rojo, precisamente.

Tengo unas ganas de hincarle el diente...






viernes, 17 de junio de 2011

Jo con el huerto

Hola de nuevo, estimados macetohuerteros y afines.

En el insulso artículo de hoy, vamos a darle un repaso al estado general del huerto. Del sargento, nos ocuparemos otro dia.

Las tomateras ya están dando su fruto y, ¡oh, sorpresa!, no son brécoles ni cacahuetes. Son ¡tomates!

Y, por si fuera poco, nada más y nada menos que Marmande y Monfavet. En las fotos podeis ver algún que otro hermano mayor, con su ristra de hermanos menores, y un Marmandito arrugadito acompañado de unas cuantas flores.

Las plantas de pepino van a su aire, más despacito, pero ya asoman las primeras flores. Como una imagen vale más que mil palabras, y las palabras ya están a euro y pico, os pongo por ahí abajo otra foto más que lo testicula. Digo... testifica.

También os muestro una imagen general del huerto, para que veais que no son trucos del PhotoShop (más que nada, porque no lo tengo, ni lo se usar). El balcón está a reventar, sobre todo por las macetas satélites.

Es que no lo puedo evitar, semilla que veo, semilla que va a una maceta. Un dia, ví en el supermercado una bolsa de mixtura para canarios, y casi me vuelvo loco. Menos mal que imperó el juicio, aunque la muela no pudo venir, y finalmente no compré la bolsa.

Eso sí, después, en casa, mi hijo me dio unas semillas que cogió de un pimiento que utilizamos para la cena. ¿Seguirá mis pasos? Esperemos que no, porque ayer pisé un chicle y lo puse todo perdido.

Para finalizar, os muestro también una fotografia del cielo, visto desde mi balcón huerteril. No me lo podeis negar, malandrines: bonito, bonito...

Y esto es todo, desde la delegación maceto huertera de Floppy.

Moraleja: Si Dios lo quiere, y alguien no lo evita, este verano tendremos tomates de categoria superior.

Consejo gratuito: Le digo a usted, sí, sí, a usted. Usted, que ha venido a parar a este blog de casualidad, buscando información sobre otra cosa... ¿No se da cuenta, de que aquí tiene la solución a sus pesares, a su pérdida de rumbo, a su tristeza, a la calvicie? No se me haga el remolón o la remolona, y comience por sembrar algo. Esto engancha, como otras muchas cosas. Pero, oiga... esto es vida.

Nos ha joio el Floppy.